«Deal breaker, diría Liz Lemon»

Un ídolo personal y tema principal de una publicación reciente, escribió una vez en alguna parte que no hay nada más angustiante que un blog inactivo. Es cierto.

Primera orden del día: La frase «Los lomitos y la soledad no son buena combinación…» Esta frase se lleva nueve quintines y blue ribbon por mejor desencadenante de culpa del año. (Va con amor y sentido del humor, aunque no creo que el autor de la frase me lea :P)

Segunda orden del día: algo que me desconcierta del presente medio de difusión. La página de administrador de WordPress tiene la sección “Top Searches” que muestra palabras clave que los lectores usaron para buscar cosas en el blog… creo, digo de pronto me parece. ¿A qué querrán llegar algunos con esas keywords?

Bueno, al post per se. Se da por finalizado un fin de semana bizarro perteneciente a la primera semana de junio que, de ahora en más, se denomina “semana del levante” del período de cortejo de tres meses previos a lo que el profe Sergio del gimnasio llamaba “septiembre, chicas, época de apareamiento”. El viernes pasado encontramos al iluminado (en adelante, “el ilu”) en actitud sospechosa. Cae a la tardecita y dice:

―Chicas, ¿tienen té?

―Sípi, servite.

―Es porque va a venir una amiga a tomar el té.

―No pedimos información al respecto.

―Es discípula de Amma.

―Ajá, bueno.

―Y yo no tengo té.

―Servile del nuestro, no hay drama.

Cuestión que, acto seguido, viene una Aussie muy simpática, de apariencia sorprendentemente normal, trae samosas y ensaladas, y se instala con el susodicho en la cocina. Ahora, aunque el ilu lo niegue, la verdad de la hamburguesa de soja es que la señorita no era una amiga sino “u-na-a-mi-ga” (con comillitas voladoras) porque mi hermano mayor adoptivo le contó toda su vida. Si hubiesen sido amigos posta, la mina habría sabido todo de él: sus historias, rayes, discursitos sobre el amor y la felicidad, traumas familiares, etcétera. Pero no. Se estaban conociendo. Y yo ahí, en el living. Con el Jesús-en-la-boca, diría mi mamá, si el Jesús-en-la-boca fuera un enano que te muerde el pupo y te produce una infección que afecta el sistema límbico y se manifiesta en movimientos rapidísimos del diafragma pero impide producir sonido alguno… por cortesía. Estoy un 99% segura de que eso no es el Jesús-en-la-boca, pero no importa, fue divertido mandar toda esa verdura en esta publicación que les debo desde hace rato. Debido a esta «cita» que se llevaba a cabo Friday night, mi hermana adoptiva y yo decidimos fugarnos. Fuimos a este distinguido lugar: http://www.pananiarsl.com.au/ y cenamos antes de que cerrara la cocina (21 hs). Pedimos la comida a las 20:42 y ya estaban limpiando y guardando todo. Un asiático encargado de la limpieza esperó, con cara de pocos amigos, a que nos sirviéramos los aderezos y se los llevó inmediatamente. ¡Pero todavía no eran las 9 de la noche! Con mucha frecuencia, en Oz, «puntual» significa «varios minutos antes del momento estipulado» y cuesta un tremendo huevo acostumbrarse a eso. Terminamos nuestra merienda/cena de hamburguesa con papas y nos fuimos a escuchar el karaoke que recién empezaba en el Digger’s. Primer viernes de cada mes, karaoke. Música especialmente ochentosa, combinada con algunos noventosos aventurados. Porsupu, van los “Panañenses” de siempre, con una edad promedio de 50 y un importantísimo grado de intoxicación alcohólica. Son muy graciosos y te permiten evadir cualquier pensamiento relacionado con la vida amorosa del ilu. Gracias a estos virtuosos cantantes borrachos, dejamos de cuestionarnos qué clase de estómago tendría la “a-mi-ga” Aussie para tolerar esa sonrisa de dientes enormes llenos de arroz y brócoli. Y en el marco de la semana del levante, les cuento que la grata contrariedad de tener una latina bombshell como hermana adoptiva es que, indefectiblemente, se van a acercar muchachos. Ahora, a nosotras que no comemos autitos, esos rasgos arios no nos engañan. Los australianos tiran el deal breaker a escasos segundos de entablada la conversación. Para el que no es fan de 30Rock, el deal breaker es algo que un pretendiente (por falta de otro término mejor) dice o hace que te hace pasar de una actitud positiva, de conformidad amable, a una actitud de rechazo total irreversible. Algunos deal breakers australianos se detallan a continuación:

  • Un comportamiento no verbal: Miradas de psicópata enfermo lujurioso (pero pensándolo bien, esto es universal)
  • Wow, ¡sos de Argentina! Eso queda en Suiza, ¿no? Siempre quise visitar Europa.
  • Me acaban de despedir del trabajo nomás porque al jefe le pintó. Pero me conseguí un abogado alucinante que me va a ayudar a demandarlo y a ganar quichicientos mil dólares.
  • Ya vengo, voy a apostarle a ese caballo.
  • Hay un montón de famosos argentinos… Salma Hayek… Jennifer Lopez… etcétera.
  • Consigo las mejores drogas de Sydney porque tengo un amigo latino, y su papá es algo así como el embajador de Colombia, ponele.
  • ¿Qué idioma es ese que hablan? ¿Portugués?
  • Tengo un jacuzzi en el patio, para cuando organizo alguna fiesta.
  • ¡Te muestro mis fotos en mi iPhone! Ésta es mi guitarra, ésta es mi moto, ésta es una moto que me quiero comprar y que cuesta 65mil dólares, ésta es una foto de Katy Perry porque es lindísima, éste es mi amigo John con Metallica, éste –oops!– es un videito casero, perdón, haha.

1 Comment

  1. mariel

    eeee i’m another fan of liz lemmon!!! hehehe (risa en ingles para no romper la onda..)ahora me rio en frances hohoho (bah el sonido es onda una nasal pero solo a josiane le sale y a los simpson!)
    a bien tot!!!
    Mari (la amiga de la gise que hace frances)

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